Un canal de televisión regional puede servir para cosas tan importantes como dar público conocimiento de la existencia de "L´Anguleru". Un no particularmente imaginativo trasunto de ese olentzero navarro que no tardó en ser adoptado con entusiasmo por la cultura euskaldún. Hay que ser diferente a cualquier precio.
No creemos que los cerebros que están detrás de tales inventos estén muy lejos de quienes, en el nombre de otros credos, dinamitaron los Budas de Bamiyan. Pero las ingenuas gentes que se escandalizaban con aquello son las mismas que llevan a sus hijos a que participen en estas arteras demoliciones de los Reyes Magos. A fin de cuentas es patrimonio inmaterial, dirá alguno. Pero ni con declaración de la Unesco se salvarán sus majestades en algunos sitios.
Vístase un Gaspar, equipado con una de las más artificiosas barbas que venden los chinos, con un impermeable marinero y la cosa está hecha:
Eso sí, los canapés de la cenorra familiar fueron de gulas.
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