miércoles, 12 de octubre de 2016

Asociaciones de ideas y un ¡olé tus güevos!


Destaca hoy la prensa asturiana la llegada a Gijón del magnate ruso Andréy Melnichenko con su esposa y el inmenso yate que recibe su muy escueto nombre de la inicial de la exmodelo Aleksandra Nikolic. La verdad es que no tenemos muy claro en que orden deberíamos relacionar la compañía.

Y vaya usted a saber por qué, el frecuente emparejamiento entre las "profesionales del ser bella" y millonarios, mísmamente es conocido el riesgo de ver a otra de esas trabajadoras convertida en presidenta consorte de Estados Unidos, nos ha traído a la memoria una viñeta del semanario satírico francés L´Assiette a Beurre (El plato de mantequilla). En concreto una incluida en el número del 11 de enero de 1902, dedicado al dinero, que fue ilustrado por František Kupka.

El artista checo representó en la misma la generosa acción salvadora del segmento más bello de la clase trabajadora por parte de los potentados. Acompañamos esa imagen con la portada del ejemplar que puede consultarse íntegro en la espléndida colección digital de la Biblioteca Nacional de Francia (enlace al índice de esta revista).


Como la prensa también destaca hoy (enlace a la noticia en El Mundo) la confirmación del insólito hecho de que el millonario (aunque parece que no tanto como alardea) candidato a presidente de los Estados Unidos no ha pagado impuestos durante 20 años, nos parece oportuno traer otra ilustración de la misma publicación. La que muestra la peculiar forma de entender la distribución de la riqueza por algunos poderosos. ¡Ahí tenéis, votantes (añadimos nosotros), lo que os prometí! 

Volviendo al barco del ruso, les remitimos a la noticia de El Comercio a pesar de las dudas sobre al calidad de su información. Y es que en la misma también se sostiene que el ferry que próximamente servirá una línea desde Gijón tiene un coste de 5 M€. Así que, o nos están mandando un predesguace, o estuvo mucho más atinado Zapatero con su estimación del café. Y hay que ver como le pusieron.

Pero al final hemos optado por enlazárselo porque no queremos privarles de un nuevo ejemplo de uso de la entre nosotros obligatoria referencia para una distancia próxima a los cien metros: el campo de fútbol. Pero ojo, que este no sería apto para partidos internacionales por exceder el máximo autorizado para ese uso que son 110 m.

En todo caso, vamos a refrescarles un enlace ya incluído en nuestro apunte Omán y yates que conduce a la clasificación mundial por eslora de barcos de uso privado en la que el "A" ocupa actualmente la 21ª posición. Allí también encontrarán una enlace, que replicamos, a la ficha técnica de ese espantoso diseño de Philippe Starck para un artefacto cuyas formas solo estarían justificadas por una capacidad para sumergirse que no tiene. 

Pero lo que de verdad resulta preocupante es la falta de adaptación del puerto gijonés a la recepción de visitantes de esta categoría. Porque el texto de la noticia deja claro que los rusos consideran que el muelle en el que están atracados no está a la altura de sus personas y parece que van a desembarcar utilizando una nave auxiliar. Vean lo que nos dicen los periodistas:  "Todo apunta a que visitarán Gijón, ya que han pedido permiso para utilizar la embarcación de apoyo que el superyate transporta en su interior cual hembra de canguro a su cría". 

Les mostramos como funciona este marsupial de parto lateral, información gráfica que completamos con algún detalle adicional de lo albergado en su interior.


Aleksandra, la de la "A", "con" y "sin". Cuidadín con las Anastasias, guapa.


 

Ahora lo del ¡olé tus güevos! Los del ex consejero delegado de Bankia, Francisco Verdú, que fue de los pocos que se resistió al tarjetero invento compravoluntades.

Y, encima, parece que acertó de pleno en su advertencia a Rato sobre como podía acabar la cosa (ver noticia y enlace a otra de la época de la instrucción).

A más a más, es poeta y de Alcoy, población de paremiológico gentilicio donde las haya.

¡Gracias por tu honradez, Paco!





PS - El barco pequeño de Melnichenko titula La Nueva España su reseña de los visitantes rusos del miércoles 13. Y efectivamente este magnate también es propietario de otro yate homónimo (en realidad el nombre completo es "Sailing Yacht A"), este de vela, que tiene 143 m. de eslora. Pero su entrega está prevista para el año próximo, al menos eso es lo que dice al Wikipedia, y el largo plazo transcurrido desde la botadura apunta a que la puesta a punto debe estar siendo bastante dificultosa. De hecho, no hemos encontrado una sola imagen con las velas izadas. Nos traemos unas fotos de un artículo del Daily Mail de septiembre del año pasado que incluye abundante documentación gráfica.






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