sábado, 14 de marzo de 2015

Acompañadas y acompañado de serpientes


Las sugerentes imágenes de dos generaciones de la familia Kinski posando con serpientes nos indujo a comprometer en la segunda entrega de la serie de tres que dimos en titular “69 portadas con lengua” un monográfico sobre portadas con serpiente. Ya advertíamos entonces que inevitablemente habría que colar en el apunte al cantante Alice Cooper que en los años setenta hizo de la compañía de los ofidios una de sus señas de identidad. Como Miley con la lengua, vamos. A continuación les mostramos una de las características poses de Alicio en la portada de Rolling Stone de marzo de 1972 junto a la cubierta de la revista argentina Pelo en la que David Bowie ejerce de encatador de la serpiente Alice Cooper acompañado por Marc Bolan y un irreconocible Ringo Starr.


Lo de cantar con una serpiente al cuello ha tenido sus imitaciones, la más famosa quizá sea la protagonizada por Britney Spears en la ceremonia de entrega de los premios de la MTV de 2001 durante la interpretación de la canción “I’m A Slave 4 U”.  Los editores de la revista satírica MAD no desaprovecharon la ocasión de llevar a su portada una vez más a esta intérprete con el inevitable Alfred E. Newman poniendo cara al ofidio.


Años antes ya había alcanzado fama la danza de Salma Hayek, solo baile (enlace para recordarlo), ahí no había canto de la portadora de la pitón, en la sangrienta película de Robert Rodríguez “From Dusk Till Dawn” (titulada por aquí "Abierto hasta el amanecer", 1996). El ilustrador Frank Frazetta recibió el encargo de un poster que, sorprendentemente, no llegó a ser utilizado aunque posteriormente ha podido verse en algunas ediciones en DVD.


No podían faltar imitaciones como la protagonizada por la argentina Eiza Gonzalez en una reciente secuela televisiva de la película.



Comparen la fidelidad de esta reinterpretación:


Aunque no es frecuente tener a mano una pitón albina tampoco faltan cosplays como los realizados por Zulema Cabrera u otra intérprete del personaje Santánico Pandemonium de la que solo conocemos su nombre de pila: Ivy.


Otra escena cinematográficas de chica con serpiente digna de ser recordada son las protagonizada por Elizabeth Hurley en Bedazzled (aquí titulada "Al Diablo con el Diablo", 2000). Obsérvese que la serpiente de la sesión fotográfica de la que salió el poster es diferente. La impactante imagen le granjeó a la actriz inglesa algunas portadas, pero parece que se quedó con ganas de más porque algunos años más tarde volvió a posar con serpiente para la fotógrafa Ellen von Unwerth.


Quien sí está claro que se quedó con las ganas de interpretar una danza con la serpiente fue la actriz Joanna Cassidy en su papel de Zhora de la película "Blade Runner" (1982) y ello porque Harrison Ford llega a bar donde actúa cuando ya ha finalizado su número. Así que ni corta ni perezosa decidió celebrar el 25 aniversario de esta mítica película con una casera interpretación (enlace al video, no se pierden gran cosa si no pinchan) y una complementaria sesión de fotos. ¡Qué malo es hacer las cosas a destiempo!



El deporte tampoco se ha quedado al margen del cliché y si son numerosas las portadas protagonizadas acompañado por su identitaria serpiente por el luchador Jake "The Snake" Roberts, la jugadora de baloncesto Brittney Griner tampoco quiso ser menos en la cubierta de ESPN del 10 de junio de 2013. Pero en ese mismo deporte la mamba negra era uno de los apelativos de Kobe Bryant que hizo honor a ese apelativo en alguna portada como la de la revista Slam de mayo 2006.




 

Otra deportista que ha posado en una portada acompañada de una serpiente es la jugadora de hockey hierba holandesa Fatima Moreira de Melo. Un posado de 2005 en FHM en el que se mostró en algunos momentos un tanto displicente con su partenaire.



Pero vamos a ir abreviando los detalles porque la nómina, mucho más femenina que masculina, de quienes han protagonizado portadas en compañía de un reptil es muy extensa. Ahí va un puñado de ejemplos.


Volvemos a la interpretación de danzas con serpientes porque tiene una larga tradición y ya desde el último tramo del siglo XIX está documentada su presencia en espectáculos como el protagonizado por Nala Damajanti en el parisino Folies Bergère.

No tenemos espacio para extendernos sobre ello hoy, pero sí para recordar la película "Luz del Fuego" (1982) sobre la bailarina y naturista brasileña que tomó su nombre artístico de una marca de barra de labios argentina y alcanzó considerable popularidad en su país en los años 50. La intérprete de ese film al que se acusa de falta de fidelidad a la historia fue Lucélia Santos que, por ello, fue portada de Playboy en compañía de una serpiente, pero la presencia de esos reptiles en las portadas de la revista creada por Hugh Hefner también requiere, por su extensión, un apunte específico.


No podemos finalizar esta incursión en las escenas cinematográficas con serpiente, aunque en este caso sin contacto humano-ofidio, sin hacer referencia a la danza de Debra Paget en "La Tumba India" (1960), por mucho que los efectos especiales hoy resulten bastante naifs (este enlace al video sí que les recomendamos que lo pinchen; si van con prisa salten al minuto 2:30). Lo del 3:12 en la época tenía que ser brutal.

En la recta final del apunte vamos a retornar a los protagonistas del comienzo. Y es que si algunas copiaron la escenografía de Alice Cooper, este pionero del llamado "Shock Rock" no dudó en contraatacar imitando los posados de ellas. Qué es eso para un roquero de raza.


Vale, vale. Sabemos que no podemos dejarles así. Por ello vamos a concluir con la imagen más conocida de la sesión de Nastassja Kinski fotografiada por Richard Avedon en 1981 y la homóloga protagonizada 20 años después por su hija Sonja con fotos de Michel Comte. En una próxima entrega, ya será primavera por entonces, les documentaremos algunas de las muchas reinterpretaciones que ha tenido esta creatividad que se ha convertido en un auténtico icono.

 






(1)  La serpenteante mancheta tiene un antecedente en la portada de la primera época de la revista Life fechada en diciembre de 1910.






Adenda 5/2017: el cliché sigue creciendo.








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