lunes, 2 de febrero de 2015

Cuando la inspiración procede del arte XXXVIII: El grito


Continuamos con las recreaciones de conocidas obra de arte, guiados por otra de las viñetas de la portada del semanario The New Yorker del 7 de enero de 1991. Para ilustrar el mes de noviembre, Kenneth Mahood recurrió a uno de los iconos más utilizados en las portadas de esa revista, el típico pavo del Día de Acción de Gracias habitualmente representado en una escena previa a su sacrificio (algo que no le ocurriría si fuera alguno de los criados en la Casa Blanca que hace años que son indultados, ¡gestos que valora la opinión pública!). En este caso el ilustrador irandés se basó en la famosa serie de cuadros de Munch titulados “El grito”, aunque en este caso más bien estaríamos ante “el antegrito”. Ya se ve que el “horror” está en ciernes y aún no se ha desencadenado. Por cierto, que las cuatro versiones pintadas por el artista noruego pueden verse en este enlace.


Aún hay otra discreta presencia de este icono del arte en las portadas de la cabecera neoyorquina. Acompañamos la de William Joyce del 31 de octubre de 1994 con la ampliación de un fragmento que permite apreciar mejor ese artístico guiño.


La revista Time llevó a su portada por primera vez el cuadro de Munch en 1961, por medio de una versión literal. No es muy dada esa cabecera a versionar obras de arte. Sin embargo, en 1998 volvió sobre el famoso icono, pero trastocado en una parodia que buscaba el contraste con el espíritu original. Una imagen al servicio de un artículo sobre la importancia de reducir el nivel de ruido a que estamos expuestos.

 

El cuadro aún accedería una tercera vez a la cubierta de la prestigiosa revista en el número del 6 de octubre de 2008. Lo hizo para ilustrar las dudas que se planteaban a los electores en la elecciones norteamericanas respecto a la capacidad de los dos candidatos elegibles para sacar a la economía de su estado de postración. A su lado, la portada de la revista 'n' de la aerolínea Norwegian que en abril de 2013 trató sobre cómo fue salvado uno de los cuadros pintados por Munch. Enseguida vamos con más detalles sobre su azarosa vida.

 

Como en otros tanto casos de pinturas de éxito, no es sencillo explicar por qué esta pintura ha llegado a ser tan popular, pero un robo siempre ayuda, como ya vimos en su día que ocurrió con el caso de la Mona Lisa. A las seis y media de la madrugada del sábado 12 de febrero de 1994, cuando nadie custodiaba la Galería Nacional de Oslo porque la policía noruega estaba masivamente destinada a cubrir la seguridad de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno en Lillehammer, un ladrón accedió al museo a través de una ventana ayudándose de una escalera de mano y tranquilamente se llevó la versión más famosa de «El Grito» (1893). Fue recuperada tres meses después en un hotel en Aasgardstrand, al sur de la capital noruega, donde el autor del robo, llamado Pal Enger, fue detenido. 

Diez años después otra versión de mayor tamaño de «El Grito» y una «Madonna» del mismo pintor eran robados a plena luz del día ante la impotente mirada de los visitantes del Museo Munch de Oslo. Fue el 22 de agosto de 2004 cuando tres encapuchados irrumpieron pistola en mano en el museo, en pleno horario de visitas, y huyeron con los lienzos causándoles considerables daños. También estos fueron detenidos dos años más tarde, gracias al soplo de uno de los ladrones que buscaba negociar una salida con reducción de su condena, tras constatar que los cuadros eran invendibles. La restauración de este “Grito” es que la que dio pie a la curiosa portada de la revista “n” publicada por Norwegian Airlines, en la que se ilustraba el tratamiento que hubo que aplicar al “herido”. Y , por cierto, uno de los aviones de esa compañía luce un retrato del pintor en el estabilizador de cola (ver imagen) en el marco de la política de dedicar su aeronaves a destacados personajes nórdicos ( “Our heroes” ).


Con motivo de este segundo robo el fabricante de las golosinas "M&M' s" lanzó una campaña en la que se ofrecía una recompensa de 2 millones de esas píldoras de chocolate. Como quien ayudó a esclarecer el robo fue uno de los ladrones, decidieron donar el valor de esa cantidad de su producto al Museo Munch de Oslo

Volvemos con las revistas para constatar que la campeona en servirse de esta obra de arte sin duda es la revista británica "The Spectator".  En la misma no solo ha sido portada en 1980 un grabado basado en el original, sino que, hasta donde nosotros conocemos, también lo han hecho cinco parodias de la obra (1993, 1997, 1999, 2006 y 2014). Una auténtica fijación con el cuadro.

  
 

Una aplicación menos dramática es  la de la veraniega ilustración de Robert Sikoryak que fue portada de la revista “The Stranger”  en agosto de 2009. Otras “apropiaciones” de la icónica imagen han sido puestas por los directores de arte al servicio de "horrores" tan diversos como los jefes estresantes (The Sunday Times 18/5/1997), la clonación (New Scientist), la acumulación de basura (portada del cuadernillo G2 del diario The Guardian) o la obsesión por la vida online (The Big Issue, edición australiana, abril 2012). 


En el caso de la portada de Newsweek de noviembre de 2013, la reproducción realizada para ilustrar un artículo sobre Sotheby´s persigue una esquemática fidelidad al original.

En el cine es notable la similitud de la pose de Macaulay Culkin que sirvió como cartel anunciador de la película de 1990 Home Alone (“Solo en casa" en España y “Mi pobre angelito” en Hispanoamérica). No podía faltar una parodia en una de las numerosísimas portadas que la revista MAD ha inspirado en el cine. Como tampoco falta en esa humorística publicación una versión del cuadro protagonizada por el Tío Sam.



Pero el personaje de cine más claramente tributario de la creación de Munch sin duda es Ghostface, el enmascarado protagonista de una popular serie de películas de terror. La famosa máscara fue creada por Brigitte Sleiertin, una empleda del arque de atracciones Fun World, para ser empleada como disfraz de Halloween, pero cuado la vieron los creadores cinematográficos Kevin Williamson y Wes Craven, decidieron aprovecharla para su, a la postre, exitoso proyecto. Este grito adaptado ha protagonizado numerosas portadas de publicaciones relacionadas con el cine y el entretenimiento. Acompañamos un par de ejemplos.


Iniciamos el repaso de los personajes de dibujos que han interpretado la escena con la versión del elefantito Babar.

En el apunte del pasado mes de julio “Cuando la inspiración procede del arte (XI): una dominical tarde parisina según Seurat” ya vimos algunas de las escenas protagonizadas por los Looney Tunes dentro del cuadro entonces comentado. En ese mismo episodio se recorren previamente otros cuadros como la “Persistencia de la memoria” de Dalí o el que hoy nos ocupa. En este último es un pisotón el que propicia que Elmer remede el gesto con la expresividad que muestra el adjunto fotograma.


El fragmento del episodio que comienza en el citado cuadro de Dalí puede verse a continuación.


La identificación con el cuadro de Munch por parte de Chuck Jones, el creador de los Looney Tunes, es indudable, como también pone de manifiesto otra reinterpretación firmada por este dibujante en 1991.

No podía faltar el famoso cuadro en los Simpsons, como puede comprobarse en los adjuntos fotogramas. La escena de la partida de futbolín perteneciente al episodio "Lisa's Sax" puede verse en este enlace. Las otras dos capturas proceden de los titulados "See Homer Run" y "Treehouse of Horror IV", que es un episodio particularmente rico en referencias artísticas. 

 


Matt Groening también incluyó esta obra en la selección de arte simpsonizado incluida en "The Simpson 1995 Fun Calendar". Junto a la ilustración del mes de octubre de ese calendario hemos colocado la versión incluida por Uderzo en el "Libro de Oro de Astérix y Obélix".

 

Disney también ha realizado su propia versión que se comercializa con la imagen de Donald dentro de la colección de pines basados en las obras maestras del arte.

Y tampoco podía faltar este cuadro en el doodle que el 12 de diciembre de 2006 conmemoró el 143 aniversario del nacimiento de este pintor noruego de quien quizá no conozcan mucha otras obras. Si quieren corregir esa laguna puede darse una vuelta por el siguiente enlace.


El icono ha llegado incluso al manga japonés, como podemos comprobar en la adjunta carta de juego de Naruto o en la versión creada para el "Museo de Arte de Hello Kitty”, un personaje que, por esta vez, parece un poco menos kawai.


Muy japonesas son también las composiciones plásticas realizadas con comida. La imagen del cuadro que hoy repasamos resulta sumamente apropiada para las mismas, pero esta es una variante interpretativa que repasaremos ya otro día. Lo dejamos por hoy con una versión de sushi-art realizada por el chef Tama-chan.





PS - Este apunte tiene continuación en el CLIPDA XXXIX: más gritos.






Adenda 5/2015: hemos topado con la versión de la revista Adbusters que mete en danza a la televisión al hilo de las adicciones a la misma.

También es interesante la transformación de los "copos smiley" en "copos el grito" representada en la revista satírica rusa Krasnaya Burda.


En el apunte no hemos dedicado mucha atención a las portadas de libros, pero nos parece interesante la siguiente de uno dedicado a las fobias publicado en 1994.





Adenda 12/2015: la alemana Wirtschafts Woche  (la semana económica) colocó en noviembre de 2015 un enchufe a modo de cabeza para ilustrar algunas tropelías de las empresas eléctricas.







Adenda 2/2017:  en 2016 hemos visto tres portadas inspiradas en 'El Grito' que nos parecen dignas de reseña.









Adenda 1/2018: a falta de portadas de 2017 que reseñar, nos traemos una curiosa versión expuesta en la "London Art Fair" de Islington (17-21 enero). Desconocemos el autor.

Ya en 2018 la primera que se ha servido de este cliché ha sido la revista francesa Courrier International. Ello para señalar el primer año de presidencia de Trump.

Advertimos que el apunte no incluye ninguna cubierta de libro basada en el famoso icono, y la de Paul Thomas para el titulado 'Seriously Funny, and Other Oxymorons' (2017) de Simon Brett nos ofrece una buena ocasión de subsanar esa omisión.





Adenda 8/2018: la brasileña Veja ha aportado en agosto un nuevo grito con el mapa de ese gigante sudamericano como cara. Aprovechamos para añadir la tapa del libro 'What I Hate: From A to Z' (2011) de Roz Chast.

 




Adenda 10/2020: Maisie Williams, intérprete de Arya Stark en la serie 'Juego de Tronos', protagoniza en el número 7 de la revista Numéro art algunas escenificaciones de bien conocidos cuadros y este fue el elegido para la portada (enlace al resto).





Adenda 9/2021: no podía faltar el grito en la extensa colección de recreaciones de famosas obras de arte realizada por la profesora ucraniana de arte Olga Tolstunova (enlace a una colección de 80).





1 comentario:

  1. Grandes portadas de una gran obra.Me sirve de inspiración para una pequeña escultura que estoy realizando sobre el Grito de Munch.
    Muy agradecido.

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