Qué, ¿nos premiamos?

Una de las prácticas que ha tenido un crecimiento mas espectacular en la última década es la concesión de premios. Eso sí, esta es, a diferencia de, por ejemplo, el popular tatuaje (vaya lluvia de entre comas ¿eh?), una tendencia de moda dirigida a las élites. Y es que aparte de que ¿a quien no le gusta recibir un premio?, tanto les insisten a los adolescentes con el asunto del emprendimiento que no son pocos los que han decidido hacer carrera en ese lucrativo negocio. Ya les tenemos hablado en el pasado mes de febrero sobre las sospechosas escobas de oro, plata y bronce y hoy vamos a requerir nuevamente la comprensión de nuestros visitantes foráneos porque vamos a utilizar otro ejemplo local como ilustración de una cuestión que nos permitimos calificar de categoría universal (aceptamos que bastaría con poner mundial, pero queda tan rimbombante) y, por tanto, reputamos (podíamos decir suponemos, id) de interés general. Nos dejamos de jueguecitos, que sabemos que cansan, y entramos en materia.

Nos tienen informado los medios locales que nuestro Alcalde ha soportado abnegadamente el siempre molesto cambio de hora consustancial con el vuelo transoceánico que ha tenido que padecer para recoger en la ciudad de Quito el premio AHCIET (*) concedido a nuestro Oviedo por la mejor práctica en la gestión del medio ambiente. El caso es que por mas vueltas que hemos dado por la web del encuentro en el que se entregaron los galardones no hemos encontrado explicación alguna sobre el logro concreto que ha sido objeto de reconocimiento, así que tendremos que conformarnos con la escueta referencia a la "gestión avanzada de la energía" que encontramos en la crónica aparecida hace algunos días en LNE. Nos gustaría tener algún detalle mas porque cuando se tiene prácticamente toda la ciudad alumbrada con uno de los modelos de luminaria mas ineficientes del mercado, cabe esperar que lo premiado no sea el resolutivo apagado que sufren desde hace tiempo dos de cada tres brazos de las muy clásicas farolas que encapricharon al anterior alcalde. Al menos se salvaron de una fea amputación que estuvo a punto de proporcionar un sustancioso contrato de achatarramiento al Llano proveedor municipal.

La crónica de nuestro periódico local nos da otro dato que no puede por mas que provocar una hilarante perplejidad: "El alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, presentó sus planes de gestión energética y también otros proyectos como el Plan Apparcar, que despertó mucho interés entre los participantes en el congreso". Queremos llamar su atención sobre el hecho de que esa presentación del sistema de reserva de aparcamiento a través de una "app" en el móvil se realizó el pasado 25 de setiembre y resulta que tan poco después como el 3 de octubre quedaba inoperativo con sospechoso sigilo y correlativo silencio mediático el dichoso invento que no ha superado el mes de prueba piloto. No sea cabroncete Alcade, no les venda a otros lo que usted no quiere y seguro que ya tenía entonces sentenciado desmontar.

Así que como los gestores de cosa pública municipal no se lo cuentan y los periódicos tampoco, tenemos que asumir nosotros la tarea de informarles que tenemos otro proveedor municipal encantado de la vida, lo suyo es facturar, deshaciendo lo que le encargaron ejecutar tan solo un mes antes. Vean en las siguientes imágenes como el 4 de octubre se repintaba de blanco lo que un mes antes nos habían mostrado como se pintaba con una señalización horizontal roja inexistente, por cierto, tanto en el código de la circulación como en las ordenanzas locales. No queremos pensar que esta pueda ser una de las causas para la súbita extinción del experimento. Observen de paso nuestros visitantes foráneos la clasicista belleza de las farolas cuyo encendido por terceras partes resulta premiable.

 Visualización de la gestión de los "Concejales Penélope":
 píntamelo de rojo en setiembre, de blanco en octubre.

La cosa no acaba ahí, porque parece que ha estado al frente de las operaciones alguien poco experimentado en pruebas piloto, somos conscientes de que nadie nace sabiendo, y menudo trabajito está dando hacer desparecer la enorme numeración que identificaba las plazas, con lo socorrido que habría sido probar con unas pegatinas hasta ver si la cosa se consolidaba. O mísmamente haber dejado los números en paz, que los pobres no molestan para aparcar.

"Así se fresa así, así". Hemos aprovechando para hacer al foto cuando tenían
 aparcada la máquina junto a la farola mientras tomaban el bocata.
Y es que la gente está muy susceptible con lo de que les hagas fotos

Así que como puede verse en la imagen ahí estuvieron unos curritos, mas cornás da el paro, pegándole un buen fresadito al pavimento de la calle que lleva el nombre de José López Muñiz, el que fuera eficacísimo Presidente de la Diputación Provincial entre 1957 y 1970. Si tienen un ratito vean aquí un artículo sobre como puso en marcha el entonces modélico Hospital General de Asturias. Igualito que ese monstruo que sigue inoperativo cuando ya han pasado mas de dos años y medio desde que Leire Pajín tuviera el descaro de venir a "inaugurarlo". Si quieren hacer memoria sigan este enlace (se recomienda tener a mano durante durante su lectura una bolsa para el vómito ).

Con todo este rollo ciertamente muy localista queríamos ejemplificar el asunto de la rendición de cuentas, que ya ven que ni para cosa tan nimia como el fracaso de Plan Apparcar es capaz de dar la cara la concejala de turno. Y es que esta cuestión fue muy oportunamente tratada en la brillante exposición del último premiado por la Fundación Banco Herrero. Los galardones que concede esta institución ya nos gustan algo mas que el recibido en mano por nuestro Alcalde, y ello a pesar de que alguno haya caído en manos tan peligrosas como las del apóstol de la independencia catalana y directivo del Barça Xavier Sala i Martí, al que en caso de que tengan la ocasión de cruzarselo en algún aeropuerto no es difícil que confundan con algún empleado de información o similar dada la estridencia habitual de sus chaquetas. Y pensar que por esta redacción tenemos alguno que se quita la corbata al entrar en El Corte Inglés para evitar que le pregunten por la sección de tallas grandes. Ahí dió muestras de independencia el jurado nombrado por el premiante Banc Sabadell, porque menudo roto le puede armar a esa entidad el primer galardonado con el Premio Fundación Banco Herrero que en aquel entonces (2002), todo hay que decirlo, disertó amenísimamente sobre la malaria y su impacto en el subdesarrollo.

Pues el premiado de la edición 2013 ha sido D. Gerard Padró i Miquel que durante el acto celebrado el pasado 30 de setiembre se refirió en su discurso a la rendición de cuentas, algo tan poco visto por aquí que ni siquiera tiene un nombre que traduzca directamente la palabra inglesa "accountability". Como ya vamos un poco extensos tendremos que volver otro día sobre esa interesante disertación porque hoy preferimos dedicar el final este apunte, mañana será menos localista, prometido, a comentar algunas de las cosas que dice Roberto Centeno en El Confidencial. Con ser recomendable la lectura íntegra del texto enlazado, por si la indudable fatiga que les habrá causado llegar hasta aquí les hiciera incurrir en la imperdonable desidia de no hacerlo, vamos a entresacar nosotros una dato que enlaza con la comentada alergia a la rendición de cuentas: en los Presupuestos Generales del Estado de 2012 se fijó como objetivo un déficit público del 5,3% que finalmente fue el doble. ¿Recuerdan vds. al señor Montoro, no digamos al Mariano Presidente, explicando este pequeño detalle? Pues los responsables del incumplimiento de tan importante compromiso, que eso son los presupuestos, no un memorandum de intenciones, siguen al frente de la economía de este país. Así las cosas, ¿merecerá la pena leerse las trolas de este año?

Finalizamos con una propuesta constructiva. Quizá fuera oportuno incluir en la legislación de Régimen Local una disposición que obligue a todo representante municipal que viaje al extranjero a presentar una memoria explicativa de los resultados de su viaje con una sucinta cuantificación del impacto económico de las gestiones realizadas. Y es que nos estamos acostumbrando a que parezca normal que cada vez sean mas los cargos municipales electos que pierden el sentido de que están ahí para gestionar la ciudad. Y nada mas. Para otros cometidos ya pagamos un Ministerio de Asuntos Exteriores. Y las vacaciones de su bolsillo, como el resto de los ciudadanos. 

(*) La cuatro entradas dedicadas a los acrónimos son buena prueba de nuestra afición por esa forma lingüística de abreviatura. Ya nos hemos referido en uno de esos apuntes a la interesante categoría de las siglas que permanecen invariantes tras el cambio de significado, pero la AHCIET trae a colación una no menos pintoresca categoría hermana de la anterior, las siglas que también permanecen inmutables a pesar de haber dejado de representar su nuevo significado. Resulta que la citada sigla es utilizada por una organización cuyo nombre completo es "Asociación Iberoamericana de Centros de Investigación y Empresas de Telecomunicaciones" nacida en 1982 con un mas restrictivo ámbito Hispanoamericano, pero no deja de resultar llamativa esa palabra "Iberoamericana" representada con la sigla H.

 ¿Y a nosotros que nos gusta mas AICIET? En internet no encontramos organización alguna con esa sigla así que en caso de que esté registrada no será tan cara de conseguir. ¡Háganlo por el bien de la ortografía de los niños!