jueves, 11 de julio de 2013

Nuestro pequeño mundo al revés



Abren el apute de hoy  dos imágenes, una actual y otra próxima a su instalación en el año 2003, de la llamada  "Vaca biológica", una obra de Cuco Suárez, artista que probablemente nunca sospechó cuan acertada iba a resultar con el paso del tiempo el nombre de esta creación de metacrilato y tubos de neón, materiales no muy aptos para la intemperie como podemos comprobar. Para orientar a nuestros lectores menos observadores sobre el curioso efecto de la acción de la naturaleza y también, todo hay que decirlo, la falta de conservación, vamos a recurrir a otra imagen más detallada.


Este es el mundo al revés al que hace referencia nuestro título, porque si lo habitual es que sean los rumiantes quienes se hagan con los brotes más sabrosos, menos frecuente es que sean unos compañeros de la serie fotográfica de ayer los que vayan tomando posesión del cuerpo de una vaca que seguramente agradecerá no hayan optado por un abordaje rectal. Mientras esperamos pacientemente el final de esta historia vamos a pasearnos hasta la otra vaca municipal que pasta en nuestros espacios públicos.


Eran tres: ¡siempre los tres! Rosa, Pinín y la Cordera. Así comienza el cuento "Adiós Cordera" que Clarín escribió a comienzos del último decenio del siglo XIX y fue publicado en la colección "El Señor y lo demás, son cuentos" (sic, con coma). Anímense a pinchar el enlace que el texto es cortito y de fácil lectura.

La representación del trío instalada en 2002 frente a la que fuera sede del sindicato vertical corrió a cargo de Manuel García Linares autor también de "La Lechera" de la Plaza de Trascorrales cuya imagen traeremos en otra ocasión.

En 1969 se filmó en el concejo de Caso una versión de la historia que hubo que trufar con tramas ajenas a las imaginaciones de Clarín para llenar los 85 minutos de la cinta. Mejor recurran a la lectura.


También resulta reseñable que fue esta obra la escogida por Correos para conmemorar el centenario de la muerte del zamorano afincado en Oviedo en el sello emitido el 13 de junio de 2001 dentro de la serie de nueve dedicada a  "Literatura Española".

Observan algunos malintencionados que el citado trío está integrado por los únicos gijoneses representados en las calles de Oviedo, porque aunque Jovellanos cuenta con un añejo monumento, carece de representación en el mismo, mientras que Paco Cascos solo ha llegado a la categoría de cartel electoral que a estos efectos no cuenta.


Otras inanimadas figuras vacunas presentes en nuestro municipio están ubicadas en el privado jardín de las monjitas eufemísticas. Allí acompañan a un saludante Juan Pablo II de factura anterior al instalado por el ayuntamiento en 2006 en la plaza dedicada al Papa polaco en el barrio de Ciudad Naranco.


El reconocimiento oficial a Carol Wojtyla es obra del candasín Vicente Santarúa (Vicente Menéndez Prendes) inspirada en el paseo que el Papa realizó por los Picos de Europa durante su visita a Asturias del año 1989. Algún espontáneo ha decidido que el bronce necesitaba un toque florido y ha obrado por su cuenta.

Otra día volveremos sobre las otras dos obras ovetenses del mismo autor, el busto del periodista Manolo Avello ubicado en el Campo San Francisco y la muy fotografiada figura de Woody Allen.





PS - Caemos en la cuenta de que nos hemos dejado sin glosar la figura de lavianés Cuco Suárez, ya ha quedado dicho que a Santarúa y Linares les tocará otro día, pero es que no es fácil describir con pocas palabras a este artista especializado en esa variante del arte efímero (menos efímero desde la proliferación de dispositivos de grabación de video) que son las performances, algo que ya habrán descubierto quienes hayan seguido el enlace que hemos colocado más arriba. Quizá se esta una buena ocasión de aplicar el aforismo mcLuhaniano. Presentamos a quienes no lo conozcan al sr. Suárez:


La imagen corresponde a la puesta en escena de "Las noticias se escriben con sangre" (2006), una obra antibelicista muy oportunamente ejecutada en el antiguo cuartel que ahora forma parte de las instalaciones de la Universidad de Oviedo. La fotografía tuvo notable difusión en internet donde aparece en numerosos repertorios de rarezas. Incluso hay quien dice, una casi segura leyenda urbana, que en su día vio la imagen publicada con un pie en el que se explicaba que se trataba de un superviviente de una tragedia, también hay versiones que hablan de un bombero que había sufrido el incendio de su indumentaria. ¡Cuando se ha visto un bombero con madreñas!

Lo que no podemos aclararles por falta de datación es si el motorizado pianista que les mostramos a continuación es precursor o seguidor de la estética del asturiano.


Cuco, ¡quien iba a decirte que acabarías codeándote  con Jovellanos y un Papa en una croniquilla!



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